sensibilidad suspendida
(razón: allá)
me siento distinta, como si una extraña paz me re-corriera
pasé un cuarto de hora entre una salida de metro, un semáforo y un árbol. estaba esperando a una poeta. no quisiera que pensara que esperarla fue tedioso. fue todo lo contrario. me pregunto: ¿si me dejaran salir a las calles escribiría de otras cosas? en esa esquina del desamparo, como diría un ángel, la espera me pareció gratificante. miré a la gente, miré mucho a la gente. pensé en mí ayer como un animal enjaulado. no imaginé que necesitaba tanto esto, esto de poder mirar a lo largo, sin que nadie espere nada de mí.
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8 comentarios:
Yo creía que eras leísta.
no lo sé, se me mezcla el modus bilbaino con el madrileño, creo
he dejado de entender lo del la y el le como complementos
besitos blanca
A mí me encanta mirar a la gente, sentarme en un banco, escribir lo primero que se me pasa por la cabeza, lo primero que pasa ante mí, lo segundo, lo tercero y el resto... todo se apropia de uno que ha dejado de ser uno-detenido y es percepción o eso se intenta. Estar estático también como Ana Matey, por ejemplo, ser solo ojos (4), etcéte-tera bytes de información pasando ante uno que no es.
es bonito mirar, a lo lejos. y ver.
Yo soy leista radical.
ooooooooooooo...me gustó!
"sin que nadie espere nada de mí. "
BLANCA LE RADICAL
muchas veces me espero en las esquinas.
y espero ya no esperar nada.
me ha encantado éste, u.
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