sensibilidad suspendida

(razón: allá)



mi mal de Montano


es cierto, parís no termina nunca y siempre hay una fiesta en una azotea
una copa de champagne y un rinconcito alegre en la Provenza
es cierto que la música amansa a las fieras, que las cenizas
son cicatrices son pellejos son deseos, placeres, carencias.
es cierto, he viajado hasta Budapest, he cruzado de un salto a Viena,
he visto una alfombra que pintó Magritte, con los pies, eso es,
con los pies en el cielo, con el pincel entre el corazón y el anular,
con la mano abierta, recibiendo gloria desde un dintel.
es cierto que yo siempre he querido vivir colgada de un arbotante,
sacando la cabeza por la minúscula ventana del románico,
diciendo, a voz en grito, en el metro, en el aeropuerto, en el pasillo
de mi inanidad, que soy romántica sin ser cursi, que soy distante.
es cierto que no me pinto nunca los labios, es un quieroynopuedo,
si siento algo ajeno en mi boca quiero que me estén besando,
mordiendo, salivando, escupiendo. es cierto que me cuesta arribar
a puerto Montano, es cierto que me acerco a Cayo Bolaño, es
tan cierto que, como diría Sergio Pitol, algo está pasando.
es tan extraño que se mueva el cimiento sin sentir dolor.

2 comentarios:

elisabeth dijo...

La imagen me recuerda a mis desayunos diarios, con libro y café. He llegado a Bolaño, detectivescamente, le leo de noche tumbada en la cama antes de cerrar los párpados. Esta siendo mi primer Bolaño, y saboreo cada palabra como si fuera la última.

Hace un año le regalé a Jonay el libro de tu foto, pero la edición de compactos. Me lo prestó luego y sigue en mi estantería.

Buenas noches reina, un abrazo fuerte.

zeta dijo...

Un pincel entre el corazón y el anular: brillante, me gustó mucho esto. Disfrute su bebida, bye.