sensibilidad suspendida

(razón: allá)



entre la niebla y la nieve

la forma del hielo adquiere
tonalidades de muerte,
amarilla, aviesa, lejana
como una sordera, escarchada
como las frutas pasadas,
convirtiendo las aceras
en espacios atemporales
por donde no corre el aire,
como mi garganta, como la
nebulosa debajo de las
pestañas,
ya no importa el borde
palpebral, no importa
la capacidad torácica
ni mi utópico bivalvo
pero yo, por suerte,
sirvo para escuchar,
pero yo, por suerte,
de tanta muerte,
no me moriré jamás

6 comentarios:

Comtessa d´Angeville dijo...

Ayer me acordé muy mucho de ti.

Anónimo dijo...

Yo te dejo un abrazo..de esos grandes y largos, de los de quedarse mucho rato ..

Anónimo dijo...

Yo soy yo, Esther, la nebulosa disuelta..

Lara dijo...

gorka (¿gorka es un nuevo heterónimo tuyo? ya imagino que no, pero casi, no?) remedó tus palabras o reordenó palabras o... no me queda nada claro el origen creativo pero eso siempre fue lo de menos, porque el creativo sustancioso es genial, ya te dije

y de éste, vaya final, vaya tres versos!

javitrax dijo...

me haces llorar chica inmortal

Anónimo dijo...

muy Ángel