La tristeza gemebunda de ese inmóvil pez espada cuyo ojo no gira,cuya fijeza quieta lastima su pupila,cuya lágrima resbala entre las aguas mismas sin que en ellas se note su amarillo tristísimo. (Sin luz. Vicente Aleixandre)
releo ese poema que sale en el link, que no sé exactamente por qué sale ése, debe ser azar,bueno, releo y alucino.. yo tengo un iris amarillo. es bastante raro, de hecho. en el viaje a francia, la guia que teniamos, delphine, una chica seria.., cuando ya cogió un poco de confi conmigo me dijo: cuando llegaste a chamartín creí que llevabas lentillas. qué dices, le dije yo, y ella añadió: sísí, por la parte amarilla interior en el verde. me dejó acojonada. porque suelo pensar que los ojos que tengo es mi herencia materna. la única! y porque siempre me parece que aleixandre tiene razón
7 comentarios:
supongo que lo que te quieren (-eremos) es por esas cosas que son solo tuyas
lee despacio los primeros versos del poema:
El pez espada, cuyo cansancio se atribuye ante todo a la imposibilidad de horadar a la sombra,
de sentir en su carne la frialdad del fondo de los mares donde el negror no ama,
donde faltan aquellas frescas algas amarillas
que el sol dora en las primeras aguas.
intentaré ir a madrid cuando puede. apetece tomarse contigo algo calentito en tu cueva.
septiembre nos ha hecho aprender. es bueno añorar lo que está por llegar. yo es lo que más deseo ahora.
abrazo de pupila miel a pupila amarilla.
necesito verte el amarillo en tus ojos.
oye cuando nos echaremos a la cara u, y poder ver el amarillo del iris, si quieres estas invitada a colgar poemas de arboles este domingo, lo tengo anunciado en mi blog.
Verdes y amarillo... Si duda hermosos como los versos de Aleixandre
sin dudas, sos un ser muy pero muy especial.
abrazo, voy de a poco, muy poco.
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