rebeca yanke hace las gestiones rutinarias ineludibles
mientras u sueña, o enmudece, o redunda
escupe, se retuerce e incluso araña
por suerte luego (generalmente) se percata
mientras la impUesta prefiere no pensar
en todas esas ocasiones en las que no se dio cuenta
de alguna cosa, o tal vez de nada
estamos todas muy contentas hoy,
hemos estado mucho tiempo solas
preguntándonos cosas, saboreando las respuestas,
y sin llorar. sin llorar tampoco hemos pensado
en el cuidado esencial
en el porqué de esta necesidad, aún más:
por qué u habla tanto de cuidar, y llega convertir
en bandera, máxima paroxista, al cuidado esencial?
por qué rebeca se siente pudorosa, como cuando
necesita besos morados, besos capaces de arrancar
el daño, y a veces teme practicar el cuidado esencial?
pensarán que estoy loca,
pensará que estoy loca
me volveré loca.
me volverás loca.
me estás volviendo loca.
me pone localocaloca.
y nuevamente, blablabla.
*para Adrià, rey de Escocia,
que a veces se deja cUidar
4 comentarios:
Are you crazy?
Tengo unas cuantas papeletas, ¿no crees, Popeta?
Lo que tÚ escribes si que es un saco sin fondo de sorpresas.
Yo acabo de empezar, no se a adonde voy, pero dudo que sea la autopista 65 o el ojo de pez del fondo de una botella de ginebra: no bebo.
+ Besos
Lo importante es que las dos me dejen de llorar y los besos morados las inunden. Eso quiero para las dos.
Beso,
Maya
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